La teoría del iceberg

Desde que empecé mi recuperación del TA he oído y leído la metáfora del iceberg en varias ocasiones, y cuánto más me adentro, más me doy cuenta que el atracón, las restricciones alimentarias y la obsesión por el peso sólo son la cara visible de la enfermedad, pero debajo hay mucho más.

En concreto, los trastornos alimentarios se dice que son como un iceberg porque solo el 10% es visible en nuestros comportamientos (el síntoma), mientras el 90% restante permanece sumergido, las emociones y las inseguridades que originan la enfermedad.

Teoría del Iceberg TCA Trastorno Atracón

El 10% superficial, la punta del iceberg, son los nuestros comportamientos «extraños»:

  • Exigencia
  • Perfeccionismo
  • Control / Descontrol
  • Obsesión
  • Comparación

El 90% restante es la base sumergida del iceberg, sentimientos y emociones de:

  • Inseguridad
  • Rechazo
  • Tristeza
  • Miedo
  • Ira
  • Ansiedad
  • Vergüenza
  • Aburrimiento
  • Soledad
  • Frustración
  • Culpa

Lo invisible, esta parte íntima y emocional, tiene que ver con nuestra personalidad y nuestra historia vital: aspectos internos como el perfeccionismo o la dificultad de controlar o expresar las emociones ante algo que para otros puede ser normal y cotidiano, o aspectos externos con influencia interna, como haber sufrido algún tipo de abuso, figuras de apego negligentes (padres dejados, desbordados, sin límites o muy estrictos), duelos…

El trastorno alimentario acaba siendo un intento desesperado de controlar y calmar esas emociones y sentimientos ocultos de frustración, impotencia, auto-crítica, miedo… los callamos comiendo!

Toda la vida he intentado actuar sobre la parte visible, los atracones, iniciando mil dietas y mil buenos propósitos que empezaban un lunes, y acababan, en el mejor de los casos, el miércoles siguiente. Pensar en el peso sólo me ha servido para cronificar los atracones y vivir frustrada.

Ahora me he dado cuenta que para que la recuperación sea completa, tengo también que trabajar más dentro, en mis emociones, para descubrir qué no está bien y aprender nuevas formas de gestionarlo. Hacer un viaje desde lo más superficial a lo más profundo de este trastorno, y de mi misma.

Hasta el pasado diciembre no he sido consciente que los atracones eran una alerta que me estaba avisando de un desequilibrio, algo que aún desconozco y que no he aprendido a gestionar de otro modo, que intuyo relacionado con la seguridad, el miedo, la soledad, la insatisfacción y el rechazo.

Los atracones han sido mi elección inconsciente para solucionar ese desequilibrio, y me han ayudado a «sobrevivir». Pensando en positivo, siento que me están dando la oportunidad de revisar a fondo mi comportamiento, probablemente porque ahora estoy preparada para trabajarlo, buscar alternativas y reinventarme.

Hasta que no he tenido conciencia del trastorno no he podido empezar a observarlo y querer descubrir qué ha estado pasando con mi cuerpo y mi alimentación. El camino es investigar en qué grado me acepto, si estoy satisfecha en lo personal, como cuido de mi misma y cuales son mis necesidades y emociones.

¿En qué punto os encontráis vosotros? ¿Estáis de acuerdo con esta imagen del iceberg?
Photo by Annie Spratt on Unsplash

Un comentario sobre “La teoría del iceberg

  1. Totalmente de acuerdo!!! La comparación con el iceberg es realmente acertada… hasta que no indagas y te sumerges en las aguas bravas, no es posible ver todo lo que hay debajo… Lo importante es ser consciente de que hay una parte sumergida, y sobre todo, querer sumergirse en esas aguas heladas.¡Bravo!

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